LAS ALERGIAS ALIMENTARIAS DE SU HIJO

¿Se pregunta por dónde empezar cuando se trata de alergias alimentarias y su hijo? ¡Déjanos ayudarte!

Presentación de alimentos sólidos:

Siga las recomendaciones de su pediatra sobre cómo y cuándo comenzar. Por lo general, se sugiere comenzar con granos, luego verduras y frutas verdes y amarillas. Las nuevas recomendaciones sugieren introducir huevos revueltos, productos lácteos (como queso blando y ciertos yogures) y mantequillas de nueces en el primer año de vida. La incorporación temprana de estos alimentos a la dieta puede ayudar a prevenir el desarrollo de una alergia alimentaria. Estos alimentos deben introducirse en casa comenzando con un pequeño bocado al principio mientras se monitorea durante 30 minutos. Aumente la cantidad administrada durante los próximos tres a cuatro días. Si su hijo tiene eccema de moderado a grave, o una alergia alimentaria conocida, debe ser examinado por un alergólogo antes de introducir cualquiera de los “8 grandes” alérgenos alimentarios.

Si su hijo tiene una reacción, el primer síntoma común que debe buscar es la urticaria, pero es posible que haya otros síntomas como hinchazón de los labios, tos, sibilancias, vómitos o diarrea. La mayoría de las reacciones ocurren inmediatamente después de comer, dentro de los 30 minutos, pero pueden ocurrir hasta dos horas después. Por lo tanto, si observa algo fuera de lo común mientras alimenta a su hijo, detenga ese alimento en la dieta y comuníquese con su pediatra.

En la escuela:

Asegúrese de programar una reunión antes del comienzo de la escuela o tras un diagnóstico de alergia alimentaria con la enfermera de la escuela, el maestro y posiblemente el director para discutir las alergias alimentarias de su hijo y sus preocupaciones. La mayoría de las escuelas tienen un protocolo para el manejo de las alergias alimentarias que se puede adaptar a las necesidades individuales de los estudiantes. También debe existir un plan de acción para las alergias alimentarias que detalle cómo manejar una exposición accidental en caso de que ocurra. Este plan también debe incluir su información de contacto de emergencia. Recuerde que su hijo podría estar expuesto a un alérgeno durante una excursión, un proyecto de clase o una fiesta de la clase, así que hable con el maestro sobre cómo se manejarán estas actividades. También es importante enseñarle a su hijo cómo hablar sobre los síntomas que podría experimentar durante una reacción alérgica y qué hacer si ocurre una reacción. Ayude a su hijo a adquirir el hábito de preguntar si el alérgeno alimentario se encuentra en algún alimento que le ofrezca un adulto u otro niño. Es posible que también desee conectarse con padres que tienen hijos con alergias alimentarias que asisten a la misma escuela. ¡Los comentarios sobre sus experiencias con la escuela ayudarán!

Ocasiones especiales

Ya sea una fiesta de cumpleaños, una función social o un día festivo, es difícil mantener a su hijo a salvo de toda posible contaminación alimentaria. Incluso los miembros de la familia pueden no saber nada sobre la alergia de su hijo. Por eso es importante ser lo más detallado posible sobre lo que podría suceder durante una reacción alérgica y el tratamiento que podría ser necesario. Esté atento y no se preocupe por hacer preguntas sobre la comida que se sirve. También puede ser más fácil traer su propia comida hasta que todos estén a bordo y conscientes.